Fotógrafo: ©
Георги Герджиков
Entre los mosquiteros de Europa occidental el Papialbo es uno de los menos conocidos, pues su canto no es tan notable como el del Musical o el del Común, y los colores de su plumaje son más discretos. Además, el número de individuos de esta especie no parece muy elevado.A este mosquitero le gusta el sol y con frecuencia vive en los grandes claros del bosque, donde encuentra luz y calor. Prefiere la base de las vertientes meridionales de las montañas, con bosques secos de robles o de pinos. Ocupa también los bosques mixtos de llanura, matorrales y arbustos hasta los 1.500 metros de altitud. Los Mosquiteros Papialbos muestran cierta familiaridad en sus áreas de cría, pero sólo excepcionalmente se aventuran lejos del follaje, donde buscan los minúsculos animales de que se alimentan.El macho prodiga el canto: «sisisisisisisisisi» y no se calla más que cuando está absorto en su tarea de padre nutricio. El reclamo de alarma, un «tui» dulce, descubre a los adultos saltando entre las ramas de los matorrales.